viernes, 12 de septiembre de 2014

Preguntémonos


Desde que tengo uso de razón  siempre me pregunto lo mismo.

La razón de mi insomnio osea ya sabes, pensar.
Es cuando todos están callados.

Sigo pensando

¿Por qué cuando amamos al límite, sin frenos, es cuando peor nos va?
¿Por qué tantas palabras y no hay actos?
¿Por qué decirle que la amas si sales corriendo todo el tiempo?
¿Por qué todo se debe al tiempo?
¿Por qué tanta envidia, por qué te da miedo que esa persona sea mejor que tú?

Ya se, te da miedo que esa persona tenga mas corazón que tú.
Te da mucha rabia que con esa persona si haya historia y no contigo ¿verdad? 

¿Por qué tanta labia si no sientes nada?
¿Hasta dónde te llevo esa historia?
¿De verdad crees que vale la pena?
¿Por qué pedir consejos que no vas a seguir?
¿Por qué un día luces brillante y al otro destrozada? 
¿Qué tan brillante te puedes ver si te ves sonriendo frente a una mentira?
¿Por qué la gente se autodestruye?

Hay personas que hace falta decirles los patéticos que se ven para que dejen las lágrimas y en ese momento empiecen a sentirse más.

Y tú, persona que me estas leyendo, me imagino que conoces la dignidad ¿no?
Yo hace mucho que la conocía, pero no me atrevía a tocarla hasta cuando me tocó llorar y me rompí y fue cuando me hice todas estas preguntas y lo mejor es que no tengo respuesta.

Por que así es la vida, preguntas y más preguntas.
Pero no importa demasiado, estamos viviendo, estamos sintiendo, esa es la vida.


Entre palabras cortadas...

No hay comentarios:

Publicar un comentario